lunes, enero 16, 2012

De añoranzas.

Quisiera creer que me extrañas,
que te mueres por besar mis labios, quisiera,
que por las mañanas mi recuerdo te acompañara
y buscaras a mi vocho entre el sonido de los autos.

Quisiera, mi Shunca te confiezo,
que el aroma de mi piel sintieras de mañana
y añoraras estos brazos de consuelo, de cariño,
y quisiera que en un Lunes de escuela
tú quisieras escucharme decir "te quiero,
buena suerte, estoy orgulloso de ti".

Quisiera que tus manos me gritaran
como un niño perdido en el mercado,
y que tus miedos anhelaran mis cariños,
que la esquina confidente que admiraba
nuestros encuentros, nuestras caricias,
nuestros besos, nuestras sonrisas,
te preguntara por mí, triste por ya no vernos.

Quisiera que extrañes mis locuras,
que a media noche te levantes, buscando,
tratando de hallarme en el umbral de tu casa,
con una serenata que te diga que te extraño,
como tú, y que te quiero.

Quisiera, aunque no lo quiero, que me extrañaras,
pero no me extrañes vida mía, porque estoy aquí,
solo basta con que extrañes marcar mi número
y el teléfono, ese amigo tuyo que extraña marcarme
te dirá que el te ayuda remarcando, y entonces,
solo entonces, si me extrañas, correré a tu encuentro.

No hay comentarios.: