musica para flores

termino sudando ingenio,
con un poco de tonaya y palomitas
entre sombras de un cuarto sellado
cuando busco una cancion;
llorando intentos asta encontrar la perfeccion
y no parar entre gritos de lamento
asta gritar con sangre en los dedos;
y volar sobre orgasmos musicales,
llegando mas alla de lo predicho,
he encontrado el paraiso en 25 minutos de placer;
y seguir el rumbo fijo
asta caer dormido bajo la lluvia
empapado de luz y energia
mientras sueño flores entonando mi canto
al compas de un hijo, una creacion,
un trozo de alma que para siempre volará;
y morir deseando una orden al pastor con queso
satisfecho de dejar tu escencia
en el corazón de la vida misma.
todo eso y asi es la tarde de un musico.

Plata.